Haber publicado El bachillerato: Donde todo y nada pasa me cambió mi propia percepción de mí como escritor. Plasmar en físico un concepto que llevabas guardado por meses ante el mundo y recibir tan buena acogida le abre los ojos a cualquiera.
Por años, me acostumbré a escribir y publicar online bastante rápido. Ensayos y cuentos de manera independiente que creaban una reacción bastante espontánea en mis lectores y en mí. No le quito mérito porque fue mi manera de darme a conocer y demostrar que: “Hey, sé escribir, léeme, por fa’”.
Luego de haber publicado mi primer libro, todo cambió. Ahora no solo es un escrito pasajero que leyeron online, sino que por ahí hay 12 relatos en diferentes libreros que causaron diferentes emociones bajo un solo título. Para, al terminarlo, recibir su retroalimentación y tener un diálogo al respecto. Es un logro, es un bendito logro que a veces no le doy el mérito suficiente sabiendo que no fue fácil.
El día de la presentación, frente a conocidos y desconocidos que me habían leído o fueron allí porque decidieron primero escucharme y allí mismo tomaron la decisión de que me iban a leer, fue la última confirmación que necesitaba para reconocer que soy un buen escritor y storyteller.
Nunca olvidaré El bachillerato: Donde todo y nada pasa, quedará enmarcado en mi memoria como el momento donde le gané a la duda, al síndrome del impostor y a los pensamientos negativos que a veces abruman a uno cuando algo te importa.
Definitivamente, quiero escribir más, quiero crear más, quiero publicar más. Podría parecer que esta fue mi meta final, pero no, es el inicio de una carrera a la cual llevaba años dándole forma para poder considerarme autor.
Mi libro El bachillerato: Donde todo y nada pasa está disponible en Amazon.
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Muchas gracias por leerme, te lo agradezco.